Discurso Arsenio Escolar, presidente de CLABE, en la XV edición de los Premios CLABE de Periodismo y Comunicación

Buenas tardes.

Bienvenidos, bienvenidas a esta decimo quinta edición de los Premios CLABE  de Periodismo y Comunicación.

Bienvenidos vicepresidenta primera del Gobierno de España, Nadia Calviño; ministro de Cultura y Deporte, Miquel Iceta; presidente de la CEOE -y enhorabuena por tu reelección, querido Antonio-; secretarios de Estado; comisionada especial para la Alianza por la Nueva Economía de la Lengua; altos cargos; colegas del Club Abiertos de Editores y profesionales del mundo de la comunicación, la publicidad y del periodismo que nos acompañáis.

Antes de seguir, quiero expresar mi agradecimiento y el toda nuestra organización a los patrocinadores de esta decimoquinta edición de nuestros premios: Google, Renfe y Cedro; y a los colaboradores: OJD, CaixaFórum, Cibeles Group, Ágora News y Sweet Press.

Gracias también a todos los que habéis presentado candidaturas y al jurado, que en esta ocasión ha presidido Margarita Jerez, de la junta directiva de CLABE. En fin, gracias a todos los que habéis venido hoy y a los que estáis siguiendo la entrega de los premios en su transmisión en línea.

Tenemos ya 22 años como asociación; en enero cumpliremos 23. Hace dos años, cambiamos de nombre: Club Abierto de Editores. CLABE. Con B. Nuestro nombre dice que somos un espacio para la cooperación y la colaboración, para la competencia leal, para el diálogo, para el encuentro.

En estos tiempos tan convulsos, en los que la prensa tenemos mala prensa, vamos a intentar entre todos mejorarla, vamos a intentar ser un espacio para el debate civilizado, no para el ruido y el barro. No solo por nosotros mismos, también por el conjunto de la sociedad. Ahora que la vida pública es un guirigay y una crispación en ocasiones insoportables, no contribuyamos al guirigay, seamos más la sordina que el altavoz de los crispadores, de los agitadores.

No me canso de repetirlo. No somos un sector cualquiera. Estamos en la Constitución, somos la clave -ahora con uve- en el ejercicio de derechos de los ciudadanos de recibir libremente información veraz y ejercer así su derecho a estar informados, a participar en el debate público.

Este último año ha sido muy intenso y muy complicado. La crisis energética ha encarecido mucho algunos de nuestros principales costes. Entre ellos, el de la distribución, y especialmente el del papel, con subidas en los últimos doce o catorce meses del 60%, del 70%. La desaceleración económica ha frenado también una de nuestras principales vías de ingresos, la de la publicidad.

Pero ha sido también un año de avances. Muchos editores han completado y mejorado su transición digital y han diversificado sus fuentes de ingresos apelando a la colaboración de sus comunidades de lectores. Estamos cambiando el modelo para mejorarlo. Seguimos cambiando las cañerías sin que el agua deje de pasar por ellas.

Como presidente de la asociación, permitidme que cite expresamente algunos pasos y avances recientes que creo que son muy relevantes.

Uno de ellos, el que por fin se ha llevado a cabo la transposición de la legislación europea de derechos de autor -gracias, ministro de Cultura, querido Miquel Iceta-; transposición que entre otras cosas ha permitido el retorno de Google News a España y el lanzamiento de Google Showcase, dos nuevos escaparates con los que los medios podemos establecer más vínculos y más estrechos con nuestras audiencias.

Un dato: un tercio, el 33%, de los medios disponibles en Google Showcase en España son asociados de CLABE, gracias a un acuerdo que hemos impulsado desde nuestra secretaria y dirección general -gracias, querido Juan Zafra- y que ha permitido que medios pequeños y medianos puedan competir en el mismo espacio digital con los grandes medios de comunicación.

Con otra de las grandes plataformas digitales, Meta, también estamos colaborando, en concreto en sus programas de formación para editores y periodistas y hemos sido felicitados públicamente por la multinacional por esta colaboración.

Somos transversales, fomentamos el diálogo y el acuerdo. Como antes os decía, creemos mucho más en la cooperación que en la confrontación. Y así, nuestros acuerdos con las grandes plataformas digitales son compatibles con la estrecha colaboración que hemos desarrollado con las entidades de gestión colectiva de derechos de propiedad intelectual, y muy especialmente con Cedro. Lo hacemos en dos ámbitos:

– El reconocimiento del derecho a una compensación por copia privada a los medios de comunicación en la legislación española.
– El fomento de la aplicación de herramientas que permitan un mejor seguimiento del uso de los contenidos para combatir la piratería.

En ese proceso de adecuación de los modelos de producción, distribución y explotación de los contenidos en la nueva realidad digital, colaboramos también con OJD para establecer criterios para la certificación de las suscripciones digitales, y dotar así de transparencia al mercado y ayudar a la toma de decisiones de los anunciantes y para ampliar el número de medios que hacen uso de la certificación de audiencias,

En esta misma línea se enmarca el acuerdo con GfK Dam para que los medios más pequeños, de ámbito local o sectorial asociados a CLABE puedan acceder a los informes de audiencias del medidor. Es un paso más para lo que os apuntaba antes: el fomento de la igualdad de oportunidades y de competencia en el sector.

Este espíritu nuestro de cooperación, de colaboración, es el que nos lleva a insistir en nuestras reivindicaciones y reclamaciones para poder participar, como representantes de los medios nativos digitales y de las revistas sectoriales, en las decisiones que afectan al futuro de los medios y en los diferentes foros que la vieja aristocracia mediática quiere seguir controlando. A esa vieja aristocracia mediática, a los reguladores, a todos los agentes del sector les pedimos una apertura de miras, una mejor comprensión de la realidad digital, una mayor sensibilidad para que hagamos entre todos las cosas de manera que se garantice la sostenibilidad de un amplio abanico de medios y, por tanto, la pluralidad informativa. Pedimos también a todas las administraciones públicas una planificación más equitativa de la publicidad institucional. Más equitativa y más eficaz, pues así se garantizará la llegada de esos mensajes institucionales a los públicos más diversos.

La digitalización de los medios es imprescindible para el futuro de un sector empresarial que como decíamos antes es clave para la salud de nuestra democracia. Por ello, estamos reivindicando, con el apoyo de CEOE  y de CEPYME, un plan específico para los medios dentro de los fondos europeos Next Generation, querida vicepresidenta primera.

Somos, insisto, un sector estratégico, y más en estos tiempos de ruido, de postverdad y de desinformación. Necesitamos que nuestras empresas se doten de las mejores herramientas y que nuestros profesionales se formen de manera permanente, y equiparnos así para cumplir con excelencia nuestro compromiso de servicio público.

Un paso más que quiero destacar antes de concluir. Hace muy pocos días hemos cerrado junto a ARI, nuestros aliados en la plataforma de editores, un nuevo convenio colectivo para el sector. Ha sido una negociación larga y dificultosa, de muchos meses, y quiero dejar también constancia aquí del talante negociador de Comisiones Obreras y de UGT, talante que ha posible est convenio colectivo para el sector de revistas y publicaciones periódicas.

Quiero acabar con una cita. Es un poco larga, prestad atención. Dice así: “Con frecuencia acusamos a los medios para justificar el letargo en que se encuentran nuestras conciencias, nuestra falta de sensibilidad y de imaginación y nuestra pasividad. Los medios existen porque en el mundo entero, en las redacciones hay gente extraordinaria, sensible, de gran talento, gente que siente que el prójimo es alguien muy valioso, y el planeta en que vivimos es un lugar apasionante, merecedor de ser conocido, comprendido y salvado”. Hasta aquí la cita. Es del escritor, ensayista, poeta y, sobre todo, periodista polaco Ryszard Kapuscinski.

En los próximos minutos, en los premios que vamos a entregar, veréis que no le faltaba razón.

Gracias

Redacción

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